Al ver al pez, el maquinista supo que había un lugar donde nunca había estado.
-¡Qué lluvia! -dijo Úrsula.-Octubre -dijo él.
-¡Qué lluvia! -dijo Úrsula.
-Octubre -dijo él.
Los tejados se disolvieron a penaslos niños andaron danzandomientras las campanaspalidecían de luz
posted by cortuska @ 6:18 p. m.
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